Así por lo tanto, tomando un tren o un bus en 1 hora (puede ser más o puede ser menos) te encuentras en lugares bastante distintos a la capital y muy ricos en historia.
Toledo
A Toledo fui en bus. Era más barato y si no fuera por que de regreso nos agarramos un taco, podría recomendarlo como alternativa.
Me habían hablado un montón de la ciudad. Que era muy antigua, que se mezclaban las culturas, que estaba muy bien preservada, que era Patrimonio de la Humanidad y bla, bla, bla.
Todo esto resultó ser cierto. Toledo es algo especial principalmente por que recorrer sus calles es como retroceder en el tiempo, sin embargo supongo que mis expectativas eran demasiado altas y la ciudad a mi no me maravillo. Lejos lo que más me gustó fue la Catedral y la pintura de El Greco "La muerte del conde de Aranjuez", Martín me dijo que ese cuadro tenía algo... uhm también pienso lo mismo.
Alcalá de Henares

Famosa por su universidad que es una de las más antiguas de España, aunque en rigor la historia no es tan así. Visité la ciudad un día lunes por lo tanto gran parte de los monumentos y museos estaban cerrados. Aquí está la casa de Cervantes, aunque según mi amigo Damián (que es historiador) ese hecho no está comprobado y duda que sea verídico.
Lo entrete fue estar en el auditorio de la Universidad que es donde se entrega el premio Cervantes de literatura. Eso fue lindo, por que es un lugar pequeño, con una decoración mudéjar impresionante, pero un lugar pequeño al fin.
El Escorial
Para mi gusto El Escorial es uno de los edificios y lugares más lindos de España. Para empezar se encuentra en la sierra por lo tanto el paisaje dista mucho de la sequedad de Madrid y se transforma en castaños, viento frío pero muy limpio y un pueblito medio afrancesado-suizo, en apariencia bastante pijo (como dicen los españoletes).
El Monasterio del Escorial es monumental. Un edificio antiguo que sin embargo perfectamente podría estar siendo construido ahora y que sale por completo de la arquitectura, más bien medieval, de los lugares previamente mencionados.
El Escorial fue un lugar construido por Felipe II no sólo como panteón (allí descansa la realeza española, salvo excepciones) y monasterio, sino como un palacio de retiro espiritual y reflexión. Es esta la razón de sus líneas simples y la austeridad de su interior.
Mientras tomaba el sol en sus jardines, escuchando a Gepe, Entrerios y Javiera Mena, me pareció que el rey no pudo haber encontrado un lugar más adecuado para su objetivo.
Segovia
La gente que ha visitado Segovia inmediatamente piensa en su acueducto. Yo había visto acueductos en México y quizás por eso no me impacto tanto el de Segovia. Pero más allá se eso caminar por el centro de la ciudad, casi sin leer guías, ni mapas resulta un paseo bastante agradable especialmente cuando en España el calorón ya se ha ido pero todavía resiste el sol otoñal.
La catedral de la ciudad es bastante alta y debido a que este casco histórico se encuentra sobre un cerrito es posible divisar su torre desde varios puntos de la ciudad.
Al final del recorrido se encuentra el Alcázar, uno de los tantos palacios que utilizaban los reyes por temporadas. El edificio me pareció maravilloso. Aunque por dentro es sencillo, cuesta no sentirse un poco en el medioevo con todo y Cid incluido. El Alcázar esta en la punta de la ciudad, que divide la quebrada en dos. Lo asombroso (no solo aquí sino que en varios de los otros lugares de Europa que visite) es como todo es tan antiguo. A nosotros que somos pueblos nuevos, no se nos olvida que en otras lados existieron culturas muy viejas, pero sí es extraño ver que aún existen edificios, por ejemplo, del siglo III y más raro todavía es ver ciudades que se conservan casi completas de los primeros siglos de la era cristiana.
Así es cómo en un tren de cercanías o bus, sin gastar grandes sumas de dinero, se puede dejar un poquito el ajetreo de Madrid y sin darse uno mucha cuenta, viajar de pasadita en el tiempo.